La higiene del sueño, son una serie de hábitos relacionados al entorno de tu habitación, horarios, rutinas, hábitos tanto diurnos como nocturnos, en general consejos que debes seguir si quieres facilitar el proceso de conciliación y mantenimiento del sueño.
La higiene del sueño nos ayuda a dormir mejor porque se enfoca en establecer un ambiente adecuado para dormir y en adoptar hábitos saludables que la relajación y la conciliación del sueño, lo que puede resultar en un sueño más reparador y una mayor sensación de descanso y bienestar.
Estas prácticas incluyen, entre otras cosas:
1. Mantén un horario regular para ir a dormir y para despertar y respétalo diariamente, incluso fines de semana.
2. Si tomas siestas, deben durar máximo 30 minutos y ser temprano en el día.
3. Evita la ingestión excesiva de alcohol y fumar 4 horas antes de dormir.
4. Evita el consumo de cafeína 6 horas antes de ir a acostarte, esto incluye té, refrescos y además chocolate.
5. Evitar los alimentos pesados, picantes o azucarados 4 horas antes de acostarte. Un refrigerio ligero está bien.
6. Haz ejercicio con regularidad, pero evita hacerlo antes de ir a dormir.
7. Usa ropa de cama cómoda, con texturas suaves y transpirables.
8. Encuentra una configuración cómoda de temperatura, mantén tu habitación fresca y ventilada.
9. Bloquea ruidos que puedan distraerte y elimina la mayor cantidad de luz posible.
10. Reserva tu cama solo para dormir y las relaciones sexua- les. Evita hacer tareas, trabajo o pasar tiempo de ocio en tu cama así solo fomentas una relación cama-descanso.
Por ejemplo, mantener un horario regular de sueño ayuda a regular el reloj interno del cuerpo, lo que hace más fácil quedarse dormido y despertarse sintiéndose descansado. Crear un ambiente adecuado para dormir, con una habitación oscura, fresca y silenciosa, ayuda a reducir las distracciones y el estrés, lo que puede mejorar la calidad del sueño.
Además, limitar el consumo de cafeína, alcohol y nicotina, así como evitar las comidas pesadas o picantes antes de acostarse, puede reducir la probabilidad de tener problemas para conciliar el sueño o despertarse durante la noche. También es importante limitar el uso de dispositivos electrónicos antes de acostarse, ya que la luz azul que emiten puede interferir con la producción de melatonina, lo que puede dificultar la conciliación del sueño.
La higiene del sueño es importante porque el sueño es esencial para la salud y el bienestar general. La falta de sueño puede tener un impacto negativo en la salud física y mental, la capacidad de concentración, el estado de ánimo y la calidad de vida en general.
