Para muchas mujeres, el sueño puede ser todo un tema durante el embarazo, e incluso después de dar a luz. Se cree que al menos el 50% de embarazadas sufren de insomnio.

Los cambios físicos, la incomodidad, los cambios hormonales, las emociones y ansiedad por ser madre, sobre todo la primera vez, conducen a una serie de problemas para dormir.
A medida que pasa el tiempo, también pueden experimentar dolor de espalda y tener problemas para encontrar una posición cómoda para dormir.

Los trastornos del sueño más comunes que tienden a ocurrir son la apnea obstructiva del sueño, el síndrome de piernas inquietas y el trastorno por reflujo gastroesofágico.

Dormir bien durante el embarazo es importante tanto para la madre, como para el bebé. El sueño es parte fundamental del cuidado prenatal.
El sueño es crucial para la memoria, el aprendizaje, el apetito, el estado de ánimo y la toma de decisiones, todo importante para recibir y atender a un recién nacido.

Las principales estrategias para reducir los problemas de sueño incluyen ajustes en la posición para dormir y hábitos saludables de sueño.

Es importante que antes de tomar cualquier medicamento o remedio a base de hierbas para ayudar a conciliar el sueño, consulten con su médico.


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